martes, 30 de septiembre de 2008

Cosas que a lo mejor podrían suceder.

Sí, es parecido a "Cosas que a lo mejor le pasaron a Picasso", pero créanme: a mí se me ocurrió primero. 

¿Y si de repente, al salir de una galería, fijáramos la vista en una chica muy muy linda, y ésta explotara cual granada...?

Ó: Vas caminando por la Frondizi, a media cuadra de mi oficina, y el señor que vende Telekinos y Minibingos, en medio de su pregón: 
¡Telekinooooooooooooooooooo, hoy sortiiiiiiiiiiiiiiaaaaaa... Mene Bennngooooooo, hooooy sorteaaaaAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAHHHHHHHH ESTOOOY PODRIDOOOOOOAAHAHAAAAAA!
Y sale corriendo hasta perderse de vista... jajajaj esa sería buena. 

O también... 

Estás sentado en Movistar, esperando "tu turno" y de repente, arrojando un haz de luz, "atraviesa" el portal una chica muy pero muy linda -tan linda como Catherine Z Jones- y se te aproxima... y te mira... y no sonríe, tiene una cara de melancolía... como diciendo: "te extraño",  y se acerca aún más, y te da el beso más rico. 

Pero... 


Estás sentado en la compu, a las 4 de la mañana. Tu compu está ubicada al lado del portón, ese que ántes era el del garage... y estás ahí, frente al monitor, hablando con esa chica... con ESA chica... y de repente... "toc, toc, toc", suena el portón. Te parás, abrís, y lo ves: Joaquín Sabina, borracho... fumando un porro, diciéndote: "¿Tenés un güisqui?" (pausa) "Sin, soda, enserio". 


Aunque... 

Estás viendo una peli que te prestó tu hermano que se llama Carlitos, y está muy buena... y de repente... ¡SORPRESAAAAAA! se cambia la imágen, y aparece Julián Weich y te dice: ¡Te ganaste un viaje a Cuba marido!  


También podría pasar que Rocío decida de una buena vez dónde DEMONIOS nos vamos a hospedar. Eso sí sería bueno que suceda. 
Hasta la próxima. Dejo una foto de mi Maceo... 









lunes, 29 de septiembre de 2008

Que llueva, si total...


LLUVIA 

La lluvia tiene un vago secreto de ternura,
algo de soñolencia resignada y amable,
una música humilde se despierta con ella
que hace vibrar el alma dormida del paisaje. 

Es un besar azul que recibe la Tierra,
el mito primitivo que vuelve a realizarse.
El contacto ya frío de cielo y tierra viejos
con una mansedumbre de atardecer constante. 

Es la aurora del fruto. La que nos trae las flores
y nos unge de espíritu santo de los mares.
La que derrama vida sobre las sementeras
y en el alma tristeza de lo que no se sabe. 

La nostalgia terrible de una vida perdida,
el fatal sentimiento de haber nacido tarde,
o la ilusión inquieta de un mañana imposible
con la inquietud cercana del color de la carne. 

El amor se despierta en el gris de su ritmo,
nuestro cielo interior tiene un triunfo de sangre,
pero nuestro optimismo se convierte en tristeza
al contemplar las gotas muertas en los cristales. 

Y son las gotas: ojos de infinito que miran
al infinito blanco que les sirvió de madre. 

Cada gota de lluvia tiembla en el cristal turbio
y le dejan divinas heridas de diamante.
Son poetas del agua que han visto y que meditan
lo que la muchedumbre de los ríos no sabe. 

¡Oh lluvia silenciosa, sin tormentas ni vientos,
lluvia mansa y serena de esquila y luz suave,
lluvia buena y pacifica que eres la verdadera,
la que llorosa y triste sobre las cosas caes! 

¡Oh lluvia franciscana que llevas a tus gotas
almas de fuentes claras y humildes manantiales!
Cuando sobre los campos desciendes lentamente
las rosas de mi pecho con tus sonidos abres. 

El canto primitivo que dices al silencio
y la historia sonora que cuentas al ramaje
los comenta llorando mi corazón desierto
en un negro y profundo pentagrama sin clave. 

Mi alma tiene tristeza de la lluvia serena,
tristeza resignada de cosa irrealizable,
tengo en el horizonte un lucero encendido
y el corazón me impide que corra a contemplarte. 

¡Oh lluvia silenciosa que los árboles aman
y eres sobre el piano dulzura emocionante;
das al alma las mismas nieblas y resonancias
que pones en el alma dormida del paisaje! 




Federico García Lorca. 

viernes, 26 de septiembre de 2008

Muy bueno el "Macanudo" de hoy. 


martes, 23 de septiembre de 2008

"¿Y donde está Zulema?"


                                   "De Cuba, La Verdad..."




Dígale ¡sí! a la salsa.


Mueva sus caderas. 
Compruebe su cadencia.
Conozca Cuba.
No diga nada. Más déjese llevar.  
Juegue.
Baile Salsa. 

Baile Salsa, chicu

jueves, 18 de septiembre de 2008


"Porque ellos me querían hacerme casar con el gobernador que era antes. Si, si, con Rozas" Cuenta Berta a quién sabe quien, quién sabe cuándo, y quién sabe dónde, con una mirada tímida y gesto de vergüenza.  "...pero yo le dije que noooooooo, porque ello lo único que querían de mi es mi plata" Denuncia repentínamente y cambia bruzcamente el semblante. 





Berta: Buen día
Vendedor: Buen día
B:Me mandó el presidente para que me compre un celular
V:Si, ¿qué celular quiere señora?
B: Emmmmmm (sonríe) ¡El más caro que tenga! Porque a mi me mandó el presidente del Banco porque yo soy la presidenta de Argentina, y necesito un celular. (mientras se peina haciendo ademanes de elegancia).V:Bueno, tenemos el "V3". Es el más caro que tenemos, y sale novecientos pesos. (Berta deposita en el piso el bolso de mimbre que lleva y sobre el mostrador, una carpeta con hojas)B:Lo que pasa es que a mi me querían hacerme casar con Menem, pero yo no quería, porque ese es un chanta. Si yo ántes le llevaba un montón de ropa a unos chicos que viven por allá (levanta el índice y señala hacia afuera) donde yo vivo, cerca allá de la laguna y él agarró y se robó toda la ropa y la comida que yo le llevaba a los chicos. Y ellos están enfermos y todo piojeados están ellos. Pero yo le lavo con lavandina para limpiarle todas las enfermedades. (abre la carpeta y enseña al vendedor unos escritos que parecen ser apuntes de alguna materia de abogacía) Acá dice bien todo los trámites que me están por dar la casa para que yo viva con los chicos y los cuide. (El vendedor presta atención, y sorprendentemente, con letra cursiva completamente prolija, se leen cuestiones como las que explica Berta, en un marco legal, que de no saber de dónde vienen, a lo mejor, pasan por tales)(El vendedor no aguanta la risa, Berta no soporta que la tomen por loca y súbitamente, hablando por lo bajo, agarra sus cosas y se va despacito, cierra la puerta y sigue su camino)



Yo estaba parado en la puerta de la agencia de quiniela de una amiga, y desde la esquina se escucha un llanto que se acerca. Presto atención y es ella, que se acerca cada vez mas hasta donde estoy yo. ¡guaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa! (llora y exagera Berta, aunque derrama lágrimas)-¿Qué te pasa Berta?¡mmmmmmmmmmbuaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa! ¡Me quieren mataaaaar! ¡mmmmguaaaaaaaaaaaaaaa!(Aunque sea gracioso, es inevitable compadecerse y que una profunda angustia me invada)-¡¿pero quién te quiere matar Berta?!
 (Berta jamás me mira a los ojos) (no deja de tener espasmos mientras llora) -¡allá el médico me quiere matar porque tengo un monstruo en el estómago! -¡¿cómo que un monstruo, Berta?! intento acompañarla hasta el final del relato sin tentarme, entendiéndola. -Yo estaba comiendo y vomité un monstruo. Porque Dios me mandó un poder que yo soy la elegida. Y me agarró la policía y me llevó con el doctor y ¡el doctor me quiere matar! -¿y como era el monstruo, Berta?-Era así como una víbora que yo tenía en la panza. -Pero a lo mejor estás enferma, Berta, y tenés que ir al médico...(Berta odia que la contradigan. Asi que empieza a putearme por lo bajo, y se va)


(Berta se acerca hacia donde estoy. Se para a unos metros, mirando hacia donde yo miro. Y empieza a hablar)-Yo me limpio la cara, así, todo, con lavandina. (hace una pausa, y se acerca levemente hacia donde estoy. Nunca me mira a los ojos)-¿qué?-Agarro un algodoncito y me limpio bieeeen, así toda la cara. Por eso tengo así linda mi piel. -¡No Berta, pero te vas a lastimar!, ¿mezclás la lavandina con un poco de agua?(Se acerca Majo, mi amiga, a escucharla)-No, así nomás te tenés que poner. Si ahora los doctores limpian todo con alcohol, pero así no se limpia bien. Yo ya les dije que tienen que limpiar con lavandina para matar todos los bichos. -¡aaaah!(Berta empieza a hablar con términos médicos y nos cuenta algunas cuestiones de cirujías. Me encantaría acordarme de las palabras precisas. Nos deja con la boca abierta. A pesar de no saber nada de medicina, se nota que Berta está diciendo cosas reales)